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En los años que llevamos como guardería infantil en Logroño hemos podido atender a todos nuestros alumnos y sus padres de la manera más profesional, brindándoles un asesoramiento completo y el consejo más personalizado. Es por ello que nos gustaría aprovechar el siguiente post para hablarte sobre la primera vez que te metes en una piscina con tu bebé: ¿Cómo conseguir que todo vaya bien?
Como ya sabrás por anteriores artículos en este mismo blog, cualquier padre puede ir a nadar con su bebé a los pocos meses para que el pequeño o pequeña chapotee y se acostumbre al agua, aprendiendo a divertirse. Sin embargo, no son pocos los progenitores que sienten algo de miedo o respeto.
Gracias a nuestra experiencia como guardería infantil en Logroño podemos aconsejarte que lo primero que hagas sea echar un poquito de agua sobre el cuerpo del bebé, de manera que vea que no pasa nada, acostándolo posteriormente de espaldas y moviéndolo con delicadeza, muy suavemente.
Además, siempre será importante que el bebé pueda mantener el contacto visual con la madre o el padre, cara a cara. De esta manera el pequeño se sentirá muchísimo más seguro y relajado, además de disfrutar de una mayor confianza.
Para evitar que se asuste o se ponga nervioso, lo mejor es escoger zonas de la piscina que no estén llenas de gente. Al ser la primera vez, todo tiene que ser tranquilo.
Si quieres conseguir que tu pequeño o pequeña disfrute del agua al máximo, permítele tener alguno de sus juguetes. Puedes colocarlo a un metro de distancia, acercándolo poco a poco para que lo recupere. En poco tiempo te darás cuenta que ya está chapoteando él solo.
En A Gatas te atenderemos de la manera más profesional, brindándote un asesoramiento completo y resolviendo cualquier duda que pudieras tener.